El concejal priista Fernando Alvarez compartió su opinión respecto a la nueva reforma aprobada por la Cámara de Diputados sobre reformar los artículos 55 y 91 con el fin de reducir la edad mínima para ocupar un cargo público de 21 a 18 años, dicha reforma contó con 439 votos a favor de las y los diputados federales.
Por ello el concejal encuentra diferentes puntos positivos que contiene esta reforma, uno de los más oportunos, es el derecho que tiene la ciudadanía de ser votada en cargos de elección popular, que consagra el artículo 35 de la CPEUM, en su fracción I, además de que el artículo 34 de la CPEUM, la ciudadanía se obtiene desde los 18 años, lo que permite un ejercicio pleno de los derechos político-electorales, más allá de participar en las elecciones a través del sufragio, sino también, estar dentro de la contienda electoral.
Además de que existen muchos jóvenes que realizan activismo social en las preparatorias e incluso secundarias que necesitan la tribuna para hacerse escuchar.
Recordando así su primera participación dentro del Partido Revolucionario Institucional en el 2009, quien a sus 15 años empezó con su activismo político, a los 18 años (2012) no pudo aspirar a una contienda por la edad y fue hasta el 2018 cuando pudo participar por una diputación local.
Agregó también que muchos jóvenes dentro de la política no nacen en cuna de oro ni con familiares dentro de este entorno, lo que implica vencer diversos retos al interior de los propios Partidos Políticos, y con esta reforma, la edad no será más un factor determinante.
Ante las preocupaciones que manifiestan las voces opositoras a esta reforma, propone un sistema de capacitación obligatoria y permanente para los servidores públicos en funciones.
Así como fortalecer los requisitos para los cuerpos técnicos legislativos, que son quienes confeccionan realmente las iniciativas, dictámenes y acuerdos para evitar cubrir cuotas políticas, perdiendo el espíritu técnico que tienen los espacios de asesores y es en esos espacios donde se debe poner atención especial y volver más rígido el aparato normativo.
