Al menos desde 2020, el Instituto Nacional Electoral empezó a investigar qué opinión tiene la gente de su trabajo y recurrió a pagar encuestas, con recursos públicos, para consultar a la población sobre qué es lo que opinan del INE, sobre su imagen y su desempeño, en medio de una confrontación casi permanente con el Gobierno federal.
Ciudad de México, 7 de noviembre (SinEmbargo).- Las encuestas que el Instituto Nacional Electoral (INE) ha contratado han ido cambiando del 2020 a la fecha. Pasaron de ser sondeos sobre la confianza de la población hacia el Instituto a ser cuestionarios sobre qué opina la gente de los recortes presupuestales o de las actividades de Lorenzo Córdova, el Consejero Presidente.
En el Portal de Obligaciones de Transparencia, que está ubicado en la Plataforma Nacional, es posible encontrar nueve encuestas que ha pagado el INE, con recursos públicos, a las encuestadoras Enkoll y GBC Ulises Beltrán y Asociados S.C. Los contratos los celebró en diciembre del año 2020 y ha gastado en ellos 1 millón 401 mil 860 pesos, de acuerdo con la misma información.
El objetivo de las encuestas cambió con el tiempo, ya que los tres sondeos por los que el INE pagó a Enkoll 681 mil 732 pesos se centraron en conocer los niveles de confianza del Instituto. Luego, para 2021 y 2022, en las encuestas que pagó a GBC Ulises Beltrán y Asociados integraron preguntas relacionadas con la imagen de Lorenzo Córdova y sobre los conflictos entre el INE y el Gobierno federal, y sobre éstos últimos la opinión de la muestra permite ver diversas inconformidades hacia el Instituto.