«Que sea la fortuna, diría Maquiavelo, que es la suerte, Maquiavelo Decía que en la política se necesitaba virtud y fortuna, no soy legislador, soy el titular del ejecutivo pero sería muy bueno que no se llevara a cabo un enjuague
En la mañanera de hoy esas fueron parte de las declaraciones qué dio el presidente Andrés Manuel López Obrador sobre la falta de acuerdo del congreso de la unión para la designación de consejeros del INE.
Una propuesta y opción viable ya que es un procedimiento para la designación que está establecido en la ley, si no se alcanza el consenso necesario entre las diferentes bancadas para realizar la designación, que debe ser aprobada por las dos terceras partes de la Cámara de Diputados.
Sí no hay consenso, lo que sigue es un sorteo realizado en el pleno de la Cámara, bajo las reglas que los propios legisladores y legisladoras aprueben.
Aunque esta propuesta dejaría de lado la posibilidad de elegir entre las propuestas a la que resulte más viable, en términos de conocimientos y experiencia en materia electoral y que garantice completa y total imparcialidad en el desempeño del cargo, esto dicho por aquellas y aquellos aspirantes que cuentan con nexos muy claros con la actual administración federal y sus integrantes.
Por otro lado las y los legisladores estarían renunciando a lo que debería ser uno de sus rasgos más distintivos, la construcción de acuerdos en favor de sus representados, que es el pueblo de México.
La incapacidad de alcanzar consensos sería el sello en esta designación.