Lo que se defendió el pasado domingo fueron privilegios de Lorenzo Córdova y Ciro Murayama, y no a los miles de personas que atienden a la gente en los módulos, quienes no les interesan, por eso su marcha fue racista y clasista, declaró.
El diputado Sergio Gutiérrez Luna, integrante del Grupo Parlamentario de Morena, afirmó que el país contará con una reforma electoral que refuerce el poder del pueblo, independientemente de que la oposición contribuya o no en favor de la democracia nacional.
El legislador expresó que la reforma responde a las exigencias de la gente, que no quiere árbitros electorales vendidos o que le deban el cargo a una facción política.
“Queremos una reforma electoral para acabar con los gastos excesivos que ustedes están defendiendo, que se acaben sus viáticos, su atención hospitalaria privada, el seguro de separación y hasta su dote matrimonial”, declaró.
Gutiérrez Luna puntualizó que las modificaciones que se buscan realizar de ninguna manera pretenden desaparecer al Instituto Nacional Electoral (INE), sino simplificar su estructura administrativa, eficientar su labor para que ofrezca las garantías de imparcialidad a todos los actores y reducir el financiamiento de los partidos políticos.
“En esta Cámara de Diputados, Morena ha tenido buena fe y estuvimos de acuerdo con la creación del grupo de trabajo plural donde analizaremos todas las iniciativas electorales, incluyendo las de la oposición, porque también tienen iniciativas en materia constitucional para tratar de buscar con consenso y generar un acuerdo para una reforma electoral”, declaró.
Manifestó que es necesario tener reglas claras en materia de paridad y acciones afirmativas, así como certeza en las decisiones que tomen tanto el Instituto como los tribunales electorales, “y no que cambien al cuarto para las doce”.
“Triste papel de la oposición que se han convertido en lacayos de Lorenzo y Ciro”, declaró.
Afirmó que lo que se defendió el pasado domingo fueron los privilegios de Lorenzo Córdova y Ciro Murayama, “y no a los miles de personas que atienden a la gente en los módulos y que ganan 8, 9 mil, 10 mil, 11 mil pesos. No les interesan, por eso su marcha fue racista y clasista”.
“Eso solo evidenció su sometimiento al poder económico, los dibujó de cuerpo entero, lacayos de Lorenzo y Ciro, por un lado, y lacayos de Claudio X. González por el otro”, reiteró.
Manifestó que el INE de Lorenzo y los conservadores son uno, y por eso basta con esperar a que se vaya el presidente consejero para aspirar a tener un verdadero árbitro que esté a la altura del pueblo mexicano.
“Faltan 140 días para que se vayan”, subrayó.