Acapulco se ha teñido de rojo los primeros días de las vacaciones de Semana Santa. Las autoridades han reportado un muerto en la playa de hornos, una de las más extensas y concurridas de la ciudad. Además, una mujer ha fallecido en el hospital después de recibir varios disparos de bala. A su lado había dos mujeres que también salieron heridas de la balacera, pero se recuperan en el hospital El Quemado, según Milenio. Las malas noticias llegan al mismo tiempo que los turistas. Las fuerzas de seguridad han acordonado parte de la playa del Horno para poder continuar con las investigaciones. Este enclave franqueado por palmeras, arena fina y hoteles de lujo es uno de los más visitados durante el periodo vacacional.
Miles de personas han llenado las calles de Acapulco estos días. La plaza luce llena de caminantes, la catedral donde se celebró ayer la fiesta del Domingo de Ramos estuvo llena de visitantes que acudieron allí para recibir la extrema unción del arzobispo Leopoldo González. Acapulco es uno de los destinos turísticos por excelencia para aquellos que buscan huir del interior del país en estas fechas. Las vacaciones de Semana Santa atraen a miles a la ciudad costera, que en los últimos año
La violencia no cesa en Acapulco pese a los refuerzos que han enviado las autoridades a este enclave turístico. La presidenta municipal del puerto, Abelina López Rodríguez, aseveró que su gobierno apoyara la seguridad en la zona con 300 policías que se repartirán por las zonas más turísticas de la ciudad. Cada día se encuentra en la prensa local un nuevo suceso trágico al que la policía llegó demasiado tarde. El fin de semana, apareció un cuerpo sin vida envuelto en una bolsa de plástico negro en la calle Ejido Las Pozas. Y el viernes, un cuerpo en estado avanzado de descomposición fue reportado por personal de seguridad flotando en la playa privada del hotel de Las Brisas, también en el puerto de Acapulco.
Aun así, la ocupación hotelera ayer superaba el 73% en la bahía de Acapulco, una media entre las tres zonas en las que se divide la zona turística: un 85,8% le corresponde a la zona Dorada, la más típica de una zona costera, con hoteles en línea de playa y amenidades que casi se adentran en el agua. Lo ocupan la playa la Diana, la playa Tamarindos y la playa del Morro. La zona Tradicional (69,3%) es más tímida, con edificios más contenidos y hoteles y restaurantes encajados en la zona más histórica de la ciudad. La zona Diamante es la más exclusiva de todas. La ocupan grandes hoteles de lujo, un vecindario exclusivo y grandes condominios con acceso directo a la bahía. Esta zona destaca también por sus restaurantes y sus clubes nocturnos.
Acapulco fue en 2022 la quinta ciudad más violenta de México, con 437 homicidios. El Secretario de Seguridad Pública, Evelio Méndez Gómez, destacó la semana pasada que la violencia en Acapulco se ha incrementado por la incesante disputa entre grupos armados, especialmente entre los Rusos, el Cartel Independiente de Acapulco (Cida) y pequeños grupos de delincuentes. Luchan por controlar el territorio más próspero para la venta de drogas en la ciudad. Para combatir a estos grupos, el titular informa que ya tienen detectados estos focos de violencia y que están trabajando para desactivarlos. Mientras, Acapulco convive en el filo entre el turismo de masas de los destinos más suculentos de todo el país y la violencia imparable que amenaza con acabar trastocando su tranquilidad.
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s lucha a marchas forzadas por preservar su estatus frente al embate de los carteles y otros grupos criminales.